Los Escritos: "Los hijos de Dios"

Hoy en día miles de cristianos viven una vida extraña, un estilo de vida que no es aconsejable; quizá sea porque han perdido la batalla contra el mundo, un rotundo desabastecimiento de la fe; necesitan urgentemente dosis de la palabra, de fe y de confianza; para vencer una pandemia mundial, un panorama anormal, donde el afán del hombre es ser millonario con una supuesta buena vida.
A veces me siento abrumado, porque me veo asediado por los problemas; pero Jesús dijo:
"Vosotros vais a sufrir por mi causa", más también dijo:
"he aquí yo estoy con vosotros hasta el fin del mundo";
estas son palabras dichas por Jesús verdaderas y sin ficción,
una estrecha pero verdadera relación con mi creador.
Varios de mis amigos cristianos se han descarriado, lamentablemente caminan por sendas equivocadas y si caen será muy difícil sacarlos del agujero del pecado, pero yo intercedo por ellos con oración, hay emoción en el ambiente, la solución es estridente. No sé lo que estoy diciendo pues es inspiración del Espíritu Santo. La verdad parezco abogado, pues tengo un caso especial, me han dicho ¡No, él ya se echó a perder!, pero me niego a creer que es un caso perdido, porque mi padre es el todopoderoso, porque hay esperanza en mí creador; porque cada vez aumentan las cosechas, ya se acerca el momento ¡Amén!, (así sea).
Porque no quiero condenación para nadie, aunque sé que es algo inevitable; porque yo formaba parte de las filas rumbo a la condenación; pero, gracias a unos siervos de Dios que predican y viven "Palabra de Vida", hace aproximadamente un año atrás, algo extraño se suscitaba, algo inexplicable por la lógica, algo inevitable para el enemigo, la semilla fue sembrada y poco a poco germinó, creció y empezó a dar sus frutos y heme aquí hoy; porque fuimos renacidos para una esperanza viva, pero en muchos casos, por situaciones adversas, esta esperanza ha pasado de ser viva a agonizante, casi como una enfermedad terminal, he dicho casi, porque para revivir nuevamente se necesita un poco de fe verdadera, increíblemente con ella se pueden mover montañas, llegó la hora de las hazañas, es por obra del altísimo que sigo vivo y sin ser vencido, porque a muchos no les importa hacerse tesoros en el cielo, pues prefieren las riquezas pasajeras que la tierra ofrece.
Al máximo vive cada día, pues cada uno de ellos significan nuevas oportunidades para aprender, para mejorar, para cambiar;
pues esta época que se vive es de pura inseguridad, donde casi no hay amabilidad por culpa de la mediocridad.
Es tiempo de contribuir, pues estoy aquí para redargüir, para enseñar, para corregir si es necesario, porque estamos aquí para compartir la palabra de salvación a todo aquel que la necesite, para compartirla con aquellos que están sumergidos en un mar llamado "pecado", también para hacerles entender a aquellos que creen que Dios los ha abandonado, que están equivocados, para dar ánimos a aquellos que están siendo atormentados; a los que son pobres de Espíritu hay que hacerles ver que necesitan crecer por medio de la palabra, para que estén firmes ante el enemigo, pues la paz anda conmigo, pero, no creas que no tengo problemas, todos sufrimos de dilemas, pero Dios es el que va adelante, yo le sigo pues él es mi comandante y también porque en el confió y sobre mi tiene dominio, porque estoy trabajando en un deber encomendado por aquel que me ha amado.
Yo sé que muchos jóvenes cristianos son puestos a prueba día a día, las situaciones son muy diferentes en la calle, que en la casa de Dios.
Por otro lado para algunos, Dios solo existe los domingos y solo hablan con él cuando los problemas se acumulan, pero, ¿Por qué las cosas tienen que ser así?, ¿Por qué el cambio no se ha dado en ellos?, los que son verdaderos hijos de Dios dentro y fuera de la iglesia son pocos, pero existen, los que andan preocupados por sus amigos y andan buscando que ellos sean salvos son pocos, pero insisten y los que andan hablando palabra de salvación también son pocos, pero persisten. ¿Por qué no todos acuden al llamado?, es algo difícil de explicar, pero cambiando el tema, necesitamos un lema, algo que nos represente en el mundo, ya lo sé, nuestra actitud será la que hará la diferencia,
en un mundo sin conciencia, pues seremos diferentes, verán que no somos como ellos; que queremos el bien y no el mal; que tenemos hambre, pero de justicia; verán que queremos justicia, pero divina; sabemos que divina, es la bendición que se nos ha dado; por cierto, esto se ha dado en un lugar extraño; además extraño es lo que vemos; porque vemos, pero sin rencor; porque rencor hay contra nosotros; nosotros, los hijos de Dios.